Muro de Cristal

Enciende tu luz, brilla tan fuerte como el sol; tanto como las estrellas o aun más que ellas. Se mi camino en una vida llena de tinieblas donde tu apareciste y me regalaste una expresión de bondad o tan solo la dulce mirada de quien a un ser de luz ve pasar.

Sueño cayendo en un vasto profundo océano cada vez más oscuro mientras en sus aguas me sumerjo; el tiempo no funciona de la misma forma, ha invadido los espacios entre dimensiones de excusas, ahora en el vasto sueño conocido como vida busco el camino que lleve al pilar donde dejaste un rastro, hada de linda melancolía permíteme encontrarte.

Muro de Cristal, hazme tan fuerte como el sol; mas allá del firmamento últimamente sus gestos son todo lo que son y jamás serán. Se de un camino que lleva directo a la luz donde los verdaderos sentimientos se esconden tras falsos recuerdos y mientras en la nada me voy hundiendo siento morir cada uno de mis sentimientos; solo en aquella inmensidad escuchare decir lo mucho que valgo para ti.

He caminado durante días tal vez solo por segundos, topándome con un cuarto diferente al que cualquier alma podría imaginarse; en su interior estaba un hada, eras tu rodeada de un muro de cristal, condenada a la triste soledad.

¿Sin conocerte sabrías que vine por ti?

¿Que al tocarte habría de encontrar lo que tanto buscaba?

Pero por mas que golpeo el muro no se cae y en mi desdicha solo caigo al piso; derramo una lagrima y dejo de soñar.

¿Que tan diferente puedes ser tu de mi? triste silueta que de la bondad viniste a estrechar tus manos conmigo aunque una pared de vidrio separa nuestras manos y detenga el estado perfecto de tenerte cerca de mi pecho, probando el aroma de tus labios que suavemente provocan e invitan a un encuentro con la verdad de una promesa; Golpeo el vidrio y este aun no se rompe.

Nuestras manos buscaron el encuentro, ¿Existe acaso un rayo de esperanza en todo esto? Si vives de emociones y yo del momento y ¿Si mi corazón se abriera quemaría consigo galaxias enteras?, toda duda que de mi debilidad brota podría arruinar el encuentro de dos manos por un el antojo de tenerte cada vez más cerca, una lagrima tal vez me enseñe algo de paciencia y que ante un muro de cristal aun puedo gozar de tu compañía y sonreír de gratitud al ver que tus manos señalan tu corazón y el mío.

El sueño venció a mi anhelo, no pude tenerte a mi lado, ahora espero ansioso el momento de buscarte nuevamente, quiero romper el muro de cristal, mis manos quieren encontrarse con las tuyas de nuevo.

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