Desde el momento en que presente mi renuncia ha pasado ya más de un mes, es gracioso cuando piensas en que no extrañaras el volver a trabajar, pero ese sentimiento llega más rápido de lo que uno se lo imagina. Mi primera semana fue exclusivamente para entregarme a los brazos de Morfeo y dormir exageradamente bien (hasta pasado el medio día en el peor de los casos) recuperando tanto sueño perdido, tantos fines de semana y feriados trabajados y así fue hasta la segunda semana ya que a partir de la siguiente me propuse a levantarme mucho más temprano para aprovechar mejor del día; el primer problema por el cual pase fue que mi horario de sueño se había alterado enormemente, por lo regular siempre dejo el trabajo para la madrugada ya que en esas horas son en las que trabajo mejor (hay paz, nadie te molesta, no hay bulla, ni personas a tu alrededor), pero desde que no estoy trabajando y no siento ese cansancio extra dormir se ha vuelto una tarea difícil ya que llegan las 2, 3 y hasta 4 A.M. y el sueño no llega para nada… y así fue hasta la 3era semana.
En esas semanas pude aprovechar mi tiempo libre para devorarme libros enteros; fueron más de 3 libros los que en una semana me leí y en lo que va de esta última semana ya voy por dos más, además he aumentado mi colección de libros para mi biblioteca aprovechando las amistades que tengo en algunas librerías de la ciudad así para saber que libros hay disponibles y si están con oferta para separarlos, de esa forma solo en esta última semana he conseguido en total unos 5 libros nuevos, aparte de los que estoy leyendo ahora. Entre otras cosas he estado pensando en algunos cambios que he querido hacerle a mi cuarto y sin dejar de lado aquellos viajes que me alegraron sobremanera, en especial uno hecho hace dos semanas a Quito, un viaje relámpago, un viaje cansado, pero donde tuve la dicha de conocer a personas tan fantásticas que aun no lo logro asimilar del todo y vivir más de cerca algo que no puedo expresar con palabras, espero tener la oportunidad de poder compartir por este medio aquellas experiencias en un futuro, mientras tanto ya hay nuevos planes de viaje para las próximas semanas.
Estoy también contento ya que en esta semana termino un semestre más, cada vez estoy más cerca de lograr esos pequeños objetivos y mi mente no deja de pensar en mil probabilidades y caminos a seguir una vez superado este reto; en las últimas semanas y aprovechando el tiempo de sobra he podido adelantar trabajos y presentar tutorías en las cuales gracias a Dios he salido bastante bien, me alegra bastante estar tan cerca de los exámenes finales y comenzar un nuevo ciclo. Y sin olvidar la reunión que tuve con una amiga de mi ex trabajo hace pocos días atrás a la cual había extrañado tanto porque cuando aun estaba en mi trabajo teníamos la costumbre de vernos y hablar todos los días; ahora que nos vimos y charlamos nuevamente me tranquilizo bastante, sin duda no puedo estar alejado de ciertas personas, por muy difícil que su carácter sea. Todos estos acontecimientos acompañados de las típicas reuniones cafeteras, aquellas alegrías compartidas a través de la distancia por otros amigos míos y esas nuevas reflexiones que le están dando un rumbo bastante interesante a este nuevo año y etapa en mi vida.
Mientras tanto la vida continua y con la expectativa de una posible nueva oportunidad de trabajo, pero ya veremos que sucede, que se haga la voluntad de Dios! Un abrazo a todos!
Relatos de las Últimas Semanas
jueves, 10 de febrero de 2011
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